
CSIF conmemora el 1º de Mayo con preocupación por la incertidumbre social y reclama soluciones reales ante la precariedad laboral
-CSIF, primer sindicato en la Mesa General de Función Pública de Castilla-La Mancha y con presencia creciente en el sector privado, reclama calidad en el trabajo, 35 horas, conciliación, igualdad real entre mujeres y hombres y mejoras en las condiciones de jubilación.
-El Gobierno retiene más de 1.500 millones de euros a los empleados públicos por la congelación salarial, retrasa la negociación de la oferta de empleo público y el derecho a la jubilación parcial
30 de abril de 2025
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), primer sindicato en la Mesa General de Función Pública de Castilla-La Mancha y con presencia creciente en el sector privado, conmemora este 1º de Mayo con preocupación, firmeza y responsabilidad ante la situación de incertidumbre y las dificultades que padece el conjunto de trabajadores.
CSIF afronta la realidad de España con sentido crítico, sin el triunfalismo del Gobierno y otras organizaciones. Compartimos la preocupación de los ciudadanos ante la inestabilidad política, la ausencia de Presupuestos Generales del Estado y los problemas reales de la gente frente a las cifras macroeconómicas: los precios todavía altos en la cesta de la compra, la carestía de la vivienda, de la energía, las situaciones de precariedad laboral que afectan fundamentalmente a jóvenes y mujeres, los retos en la Seguridad Social que dificultan cada vez más las condiciones de acceso a una jubilación, o el deterioro progresivo de nuestros servicios públicos.
En la actualidad, un 26 por ciento de los españoles se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social, un porcentaje que se eleva al 34,2% en el caso de Castilla-La Mancha. En términos absolutos, más de 725.000 personas están en riesgo de pobreza y/o exclusión social en nuestra región (65.000 más que en 2023).
CSIF valora la evolución al alza en el empleo a pesar de los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), pero es preciso alertar que los jóvenes sufren una mayor precariedad y los grupos de edad mayores son expulsados del mercado laboral o se ven obligados a aceptar trabajos con peores condiciones (la población entre 45 y 54 años representó el 45,8% del total del empleo destruido en el primer trimestre en la región). Además, continúa creciendo el paro de larga duración (más del 40% de desempleados lleva más de un año buscando un puesto de trabajo).
El mercado laboral continúa además dependiendo mayoritariamente de ámbitos como la hostelería y servicios, frente al tejido industrial. Queda pendiente una reforma en profundidad de nuestro sistema productivo y nuestro empleo continúa ofreciendo las mismas debilidades históricas. Asimismo, nos tenemos que preparar como sociedad a los retos que plantea la Inteligencia Artificial.
A corto plazo, la apuesta de CSIF pasa por la reducción de la jornada (35 horas semanales), la igualdad real entre mujeres y hombres, el teletrabajo, la racionalización de horarios para conciliación efectiva sin merma de productividad y la lucha sin cuartel frente al trabajo a demanda.
Además, CSIF denuncia la situación de discriminación que afecta a los trabajadores de nuestras administraciones públicas y que son esenciales, como ha quedado demostrado una vez más con el apagón masivo sufrido este lunes. Exigimos la negociación inmediata de un nuevo acuerdo salarial (el actual concluyó el pasado 31 de diciembre) y la negociación de la oferta de empleo público de este año.
A día de hoy, los servidores públicos tienen sus sueldos congelados y calculamos que el Gobierno está reteniendo más de 1.500 millones de euros, sumando el retraso del 0,5 por ciento adicional que aún nos deben desde el año pasado. Por ello, arrastran una pérdida de poder adquisitivo de un 8 por ciento desde 2022, tras el acuerdo firmado con CCOO y UGT y que CSIF no suscribió, y de un 20 por ciento desde los recortes de 2010.
Por otra parte, nos tememos que las administraciones públicas van a incumplir el objetivo de estabilización en el empleo (el 37,2% del total de empleados públicos de la región es personal temporal) y el Gobierno ha retrasado el derecho a la jubilación parcial.
Pese a las dificultades, CSIF celebra este Primero de Mayo como tercera fuerza sindical de España, defendiendo con orgullo nuestro crecimiento, que nos posiciona como alternativa sindical a las organizaciones de clase. Somos la primera fuerza en la Mesa General de Función Pública de Castilla-La Mancha y seguimos multiplicando nuestra presencia en el ámbito privado.
Esto significa que estamos restando espacio electoral a las organizaciones tradicionales y que somos una alternativa real y consolidada para las personas trabajadoras españolas.
Finalmente, desde CSIF también queremos aprovechar esta jornada para rendir de nuevo homenaje a todas las mujeres que siguen viendo mermados sus derechos con la brecha salarial, la discriminación y situaciones machistas que en su más grave expresión se traducen en episodios de violencia de género, violencia vicaria y asesinatos, que despreciamos.